NuPrime AMG PRA y AMG STA

– Mikkel Gige, HiFi4All

¿Necesita el equipo de alta fidelidad ocupar mucho espacio para ser bueno? Al menos eso no parece ser el caso con los nuevos amplificadores de la serie AMG de Nuprime. Pero entonces también hay mucho espacio dentro de los gabinetes delgados y atractivos. Y como algo bastante especial, Nuprime ha elegido darles una impedancia de entrada de 1,000,000 (¡un millón!) De ohmios. Se dijo que facilitaría la fuente de señal o el preamplificador sin agregar ruido innecesario. Pero una cosa es la teoría, y otra cosa es la práctica… y es mi experiencia que la coincidencia de impedancias de los dispositivos no es sin importancia, y también resultó ser cierto con los amplificadores AMG.

La serie AMG contiene el preamplificador PRA y la etapa de potencia STA, y comparten el mismo gabinete, por lo que se pueden apilar fácilmente, o simplemente se ven bien colocados juntos… Los gabinetes están hechos de fuerte placa de acero doblada para el chasis y la cubierta superior, y esta última se extiende más allá del borde trasero, por lo que se pueden esconder los cables. Debido a la baja altura del gabinete, estos serían completamente visibles de otro modo. El frente está hecho de aluminio y fresado en un bonito acabado 3D, donde el logotipo flota casi frente al frente.

El PRA tiene 4 entradas, de las cuales 1 es balanceada, y 2 salidas, nuevamente 1 balanceada. El PRA es una construcción balanceada y tiene circuitos dobles en todo. La circuitería para la señal se basa en J-FET que funcionan en puro at. A, y el control de volumen es digital en una especie de principio de escalera. La fuente de alimentación está bien dimensionada con un transformador de núcleo C y un pequeño stock de cargadores. Hay varias opciones para configuraciones con PRA, tanto en ganancia, fase y una función de sonoridad variable, que solo amplifica los graves, en pequeños pasos fáciles, sin que el sonido se vea afectado negativamente. Puede usarse ventajosamente junto con altavoces más pequeños.

La etapa de potencia STA es un híbrido de A y D, y nuevamente se utilizan J-FET en la entrada, en una construcción balanceada. Hay una buena cantidad de espacio dentro del pequeño gabinete, que se debe principalmente a la fuente de alimentación lineal clásica, que ocupa casi la mitad del espacio, y consta de un transformador toroidal de 350VA y un almacenamiento de capacitores de carga de 8800µF. Y así es cuando se utiliza at. D, donde los circuitos de salida no ocupan mucho espacio, a pesar de una alta eficiencia. De hecho, tanto la entrada como el filtro de potencia ocupan individualmente el mismo espacio que la salida.

El STA también es versátil, ofrece tanto entrada balanceada como no balanceada. Y luego se puede puentear si necesita vatios adicionales para altavoces ineficientes. ¡Y felicitaciones a Nuprime por mantener su principio de fuentes de alimentación lineales para la etapa de salida Kl. D! Demasiados fabricantes eligen la solución fácil con fuente de alimentación con conmutación.

¡Y también felicitaciones por hacer amplificadores pequeños y elegantes que demuestran que el buen equipo de alta fidelidad no necesita ocupar mucho espacio!

Impresión de escucha

El preamplificador PRA se conectó primero frente a la etapa de potencia Norma, y la impresión inmediata es que en términos de sonido no hay mucha diferencia con el preamplificador Vincent. El AMG PRA es muy musical con ese pequeño toque romántico de calidez que tanto aprecio. Y está claro cuál ha sido la intención de Nuprime con su uso de los J-FET.

Y luego establece una dinámica desde el día, que casi hace sonrojar a Vincent. Hay una presión de los tambores, de modo que te levantas un poco del asiento, y en general una “nitidez” de los detalles, que suele costar más. Pero también puede sonar un poco como si se hubiera puesto un turbo demasiado grande en el motor. Porque aunque el bajo es profundo con mucho peso, echo de menos algo de matiz, y puede volverse demasiado “retumbante” si demasiadas cosas se mezclan en las frecuencias bajas.

En el otro extremo de la escala, no hay bastante la cantidad de aire a la que estoy acostumbrado, y hay una ligera tendencia hacia los sonidos “tst”, dependiendo del material de origen. Pero la escena sonora es grande y llega casi tan lejos, arriba y atrás como lo sé. ¡Y una cosa que brilla particularmente con el PRA es el Q-sound en Amused to Death! En realidad, es solo un poco más claro que el Vincent, que de otra manera es el campeón en este campo.

La gama media es exactamente como se espera, con una naturalidad y franqueza, y una presencia y realismo con los que casi solo se puede soñar. AMG PRA no está solo en esto, y parece que más fabricantes están empezando a darse cuenta de la importancia de hacer que esta área suene bien… ¡porque a menudo lo demás se da por sentado! Y si es posible, el realismo es casi excesivo con el PRA… de todos modos, tuve que bajar un poco el volumen para Roger Waters a intervalos, pero también es una grabación inusual en este campo. ¡Pero subraya la dinámica del PRA y su disposición a ser impulsivo!

Unos buenos detalles sobre el PRA son la versatilidad de entradas y adaptaciones que exhibe. Por ejemplo, no hay diferencia en el sonido de las entradas y salidas balanceadas y no balanceadas. Y la posibilidad de adaptar el sonido, lo probé con la entrada del tocadiscos, que sonaba un poco apagada y lanuda con la ganancia normal. Pero cuando recibió un extra de ganancia, el sonido cumplió con lo descrito anteriormente. El PRA también tiene una función similar a la sonoridad, que amplifica los bajos en pasos muy pequeños, de una manera muy agradable sin afectar negativamente el sonido. ¡Con altavoces grandes no es necesario en absoluto, pero con altavoces más pequeños es una buena opción!

El efecto de la etapa STA es muy similar al estilo de reproducción del PRA, pero a pesar de la misma versatilidad, el STA es un poco más exigente. Dado que el preamplificador Vincent es inherentemente desequilibrado, comencé con esto… pero la escena de sonido no encajaba del todo. El sonido no llegaba completamente a los altavoces y la escena de sonido era plana, sin profundidad. Y el bajo sonaba como lo que se conocía en los “viejos tiempos” como típicamente “a D-bass”: mucho nivel y peso, pero sin detalles ni matices.

Se alternó varias veces, tanto en estéreo como en mono, pero no fue hasta que cambié a las entradas balanceadas (con adaptadores) que las cosas comenzaron a encajar. Pero se necesitaba más… y debido a que el STA tiene una impedancia de entrada muy alta, no debes esperar que puedas conectar cualquier preamplificador. El PRA coincidente tiene una impedancia de salida de solo 100 ohmios, que es bastante baja y claramente está diseñada para coincidir con la entrada de 1 millón (!) de ohmios del STA. Pero afortunadamente, el Vincent tiene dos salidas, una de 600 y otra de 50 ohmios respectivamente, y con esta última alcanzó el 100% con el STA.

Pero entonces el sonido también se volvió mucho más indulgente de inmediato y la imagen de sonido creció claramente en las tres dimensiones. De igual manera, los graves se volvieron más matizados y detallados, mientras que la contundencia aún estaba presente. Y eso significó que ahora podía empezar a escuchar otras cosas en la música. Al mismo tiempo, fue un gran placer musical escuchar el STA. Y fue aquí donde quedó claro que el sonido es muy similar al del PRA. Sin embargo, el STA no tiene el mismo golpe y dinámica que el PRA, pero también es bastante único en esa área.

También significó que dejé de pensar más en el sonido y simplemente disfruté de la música. Como por arte de magia, la presencia entró en la música, y tanto las voces como los instrumentos adquirieron una naturalidad a la manera que conozco. Y el sonido se extendió aún más hacia las altas frecuencias sin artefactos ni nada más que pudiera perturbar la experiencia.

Como dije, el STA también es versátil y se puede puentear para usar en modo mono. Pero no fue necesario en absoluto con los grandes y eficientes Audiovectors; un STA los manejó sin problemas. De hecho, lo único que experimenté con dos STA en modo mono fue un aumento muy evidente en la ganancia. No hubo diferencia en el seguimiento, lo cual es realmente un logro en sí mismo. Por lo general, no es mi experiencia que puentear mejore el sonido, pero aquí el STA demuestra que es la excepción que confirma la regla.

Conclusión

No hay duda de que Nuprime ha creado un par de amplificadores realmente agradables y compactos con los modelos AMG PRA y STA. También se trata de un par de amplificadores excepcionalmente versátiles que pueden adaptarse a casi cualquier cosa. Sin embargo, debido a la alta impedancia de entrada de 1 millón de ohmios, debes prestar un poco más de atención a los dispositivos con los que los conectas, y aquí idealmente deberías optar por una impedancia de salida de 100 ohmios (o inferior).

Afortunadamente, la configuración de referencia en la sala de escucha está precisamente diseñada para esto, por lo que pude sacar el máximo provecho del PRA y el STA. Y proporcionan una experiencia musical fantástica, con ese pequeño toque de calidez que me gusta. Técnicamente, también lo hacen bien, pero por razones naturales no alcanzan completamente el nivel del conjunto de amplificadores en la sala de escucha. Pero… el PRA en realidad tiene algunos trucos bajo la manga que hacen que el Vincent se sonroje un poco.

Y eso significa que sin pestañear, otorgo al Nuprime AMG PRA la distinción de “Mejor Compra” en el camino.

Enlace a la reseña –> https://hifi4all.dk/content/templates/anmeldelser.asp?articleid=3443&zoneid=3